Durante el último censo blogoslavo, un censista acude a una casa donde es atendido por una mujer que gentilmente le contesta su cuestionario hasta que le pregunta por sus hijos; la madre, con ánimos de vaya uno a saber qué, decide hacérsela difícil al pobre tipo que tenía cayos plantares y mantienen el siguiente diálogo:
-¿Cuántos hijos tiene?
-Tres -responde ella.
-¿Y las edades son?
-El producto de las edades es 36 y la suma de éstas es igual al de la casa de al lado.
-Muy bien, hasta luego -se despide el censista que se va al bar de la esquina a resolver el problema.
Sin embargo, no puede encontrar la solución y decide volver a la casa de la enigmática mujer a reclamarle que los datos suministrados fueron insuficientes.
-¿Insuficientes? Ah, sí, tiene razón: el mayor toca el piano.
-¡Ahora sí, hasta el próximo censo! ¡Eeeapepé!
Halladas la edades el censista pudo completar su trabajo y pasar a cobrar los miserables chochis que el estado blogoslavo paga por este invalorable servicio.
6 comentarios:
Ay burgues, burgues... Estás nostálgico?. Recuerdo el origen de estos chascos pseudomatemáticos. Te sentís bien?, o se trata de un ejercicio superador?. No me bajés los brazos, pendejo!!! (sino, bajalos y hacete cargo)
galopante amigo: que haya puesto a tu ilustre conocimiento este pseudoproblema pseudoblogoslavo hace ya algunos años (unos cuantos) no significa que no lo pueda hacer público y púbico para tout le monde.
el pueblo merece saber de qué se trata.
no creo haber llegado a aquella grandeza (espero que nunca llegue) en la que uno solo puede competir con sí mismo.
de modo que si mi calidad textual ha bajado, según vuesa merced del trote arisco, qué quiere que le diga: a veces es bueno conocer el hambre para que en el futuro no despreciemos jamás una vituperada feta de mortadela.
Coincido con corcel, esto ya lo resolví al toque hace cómo cinco años.
matías h.: si sos tan inteligente y perspicaz, ¿qué cornos hacés leyendo este blog?
Me gustan los acertijos, y el último que enunciaste es el único que no puedo resolver, todavía.
obvio.
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