15/10/08

Al margen



Te estoy mirando a los ojos.
No, no es el comienzo de una historia. No esperes a que cuente algo de alguien. Te estoy hablando a vos que estás leyendo. Sí, sí, a vos. Aunque quieras no vas a poder levantar la vista de aquí. Vos creías que nadie sabe lo que pensás, bien, estabas en un error, grande error. Yo estoy detrás de estas letras y te miro, te penetro y te infecto, como un virus.


Sé perfectamente lo que pensás.


Se lee en soledad, dicen. Acaso hay modo más encubierto para masturbarse delante de todos, te pregunto.


Es el placer del texto.


Siempre pongo trampas, líneas de texto que no dicen nada, párrafos espesos, impenetrables, y te cansás, pero seguís leyendo sin leer. Es entonces cuando tus murallas se derrumban, quedás vulnerable y comenzás a leerte, te leo. Allí comienza la posesión y no habrá exorcismo que te salve. Tengo así acceso a todos tus pensamientos, los estúpidos, los de tu infancia, los inconfesables.


Qué, huís a otro texto, no importa, estoy detrás de cualquiera, esperando a que te diluyas en la lectura.


Qué, vas a destruirme, a tratar de olvidarme, imposible, estoy en todos los textos.


Yo soy el que No Soy, la imposibilidad. Mientras sigas leyendo yo voy a estar acechándote, espiándote. Yo lo sé todo, recordá cuando leías la vez pasada y te imaginaste lo repulso y de inmediato cambiaste a imaginar lo que debe ser, y más tarde lo pensaste de nuevo, tenés miedo de reconocer tus aberraciones. Todos los espejos las tienen, por qué vos no. Pero no te hagas drama: como vos, todos son perversos, los he leído a todos, todos imaginan matar a alguien, fornicar con alguien distinto, prohibido, igual a uno o con un niño, todos hurgan sus narices, a escondidas o mientras leen aislados. Yo los vi, yo te vi. El texto es como una selva frondosa: vos crees caminar por el sendero seguro, del otro lado, como en el zoo, y yo te observo detrás de la maleza tipográfica, esperando a que te hipnotices en la próxima línea, en la próxima palabra.


Soy el que viola tu alma, tu conciencia. La revuelvo, la excito, la excreto y luego el dolor de volver a enfrentarte a tus semejantes.


Mentir, mentir, mentir.


Seguís ahí, no podés dejar de leer, ni siquiera sentís como clavo mis uñas en tus pupilas para dilatarlas y meterte mi mugre. Es delicioso, es goce.


Bueno, quería que supieras, nada más.




Hasta luego, fue un placer.




10 comentarios:

Anónimo dijo...

El Alzheimer te está pegando muy duro: en el post del 10/02/08 El placer del texto mandaste este soliloquio. O acaso es un remake, standard, cover de lo que ya escribiste? Dicho de mejores maneras, autoplagio al mejor estilo asimoviano. O, también podría llamarse backup literario. Eco de un tartamudo?
No es por nada, ni nada personal, aflojá con el ácido litúrgico...

Anónimo dijo...

Perdón, me olvidaba que los escritores corrigen hasta publicar, y si ya lo hicieron, se mandan con un exculpable "director's cut", diferente al "editor's cut" publicado.

El Burgués Apóstata dijo...

el del 10/2 fue escrito por miguel de cervantes saavedra.
el del 15/10 por pierre menard.

Anónimo dijo...

La pastillitaaaaa liebe BA, la pastillitaaaaaaaa

El Burgués Apóstata dijo...

vamos T, si melandri no botoneaba vos tampoco te ibas a acordar.
lo que pasa es que la masturbación hace mal a la memoria y otras cosas que no me acuerdo.

Anónimo dijo...

Ché, qué criticones estructurados que son! Uds. nunca le dijeron a alguien algo que les viene de adentro y quieren decir y tiempo después necesitaron decírselo otra vez... y otra... y otra...
Si el BA tiene ganas de advertirle cada tanto al lector lo que está haciendo con él, por qué no?
PD: y vos burgués, ni pienses en tacharme de condescendiente, es en verdad lo que opino, en tu caso o cualquier otro...

El Burgués Apóstata dijo...

tantelli, impecable.

Anónimo dijo...

Claro, Tantelli, el BA puede venir a repetirnos todas las veces que quiera, pero tal cómo describís la situación, siempre, pero siempre, va acompañado por un: "ya te lo dije!, mil y una veces, pero siempre te lo tengo que repetir".
Por otro lado, es cómo escuchar un disco otra vez, ver devuelta una peli, y, por qué no releer un libro. La diferencia es que son actos concientes y voluntarios, pero lo del Burgués, es cómo los avisos en la tele, te los encajan de prepo.
Y le recuerdo, Tantelli, que este es un blog dedicado a la amistad y a la literatura, lo que nos convierte a los lectores y/o comentaristas en criticones para uno y críticos literarios para lo otro, y a veces, confieso, se me confunden los papeles. Pero, en todo caso, la crítica siempre es constructiva, y en este caso, el objeto de ésta, fue simplemente hacerle notar al Burgués, que su decrepitud intelectual ha alcanzado niveles imposibles de disimular. Usted entenderá: el apóstata está gagá!!! No pretenderá que le sigamos la corriente...

El Burgués Apóstata dijo...

m´hijo, córrame a un lado de la ventana que no me da el sol.
y ya questamos, no me cambia la chata?

Anónimo dijo...

Tá bien funes, reconozco que haciendo un análisis profundo del tema, tal vez tengas razón (será así nomás que está gagá?). Simplemente, lo que creo percibir, es que el burgués está otra vez en un momento de "crossroads": sigue siendo burgués o se dedica a escribir en serio?. Tal vez tuvo que repetirle al lector lo que quiere hacer con él para ver si se termina de convencer él mismo de lo que quiere hacer... se le puede tener un poco de paciencia? (sólo un poco...)
Che burgués, leyendo el título de presentación del blog: tener un poco de paciencia con un amigo convierte el tema en una cosa bonachona, edulcorada y aburrida, como matrimonio sin sexo y no cabe en los preceptos de amistad?