21/1/09

Adiós Magma - Sorry Gordi, pero los ingleses leyeron mejor


Lamentablemente la revista Magma cerró.


Puesto que no se publicará la nota que entregara a principios de diciembre para publicarse en marzo 2009 la reproduzco a continuación.






Sorry gordi, pero los ingleses leyeron mejor


Este artículo pensaba darles noticias inesperadas, tales como que el rock ha muerto y que lo había hecho a mediados de 1970. Luego pensé que comunicar una noticia tan vieja no tendría sentido, entonces se me ocurrió confrontar al rock inglés con el rock yanqui en un petardista versus, y aunque algunos amigos a los que le consulté sobre el tema me dijeron que mi teoría era absurda, inútil y tendenciosa la escribí de todo modos. Será porque me parecen genialmente grotescas las cosas absurdas, inútiles y tendenciosas. En fin, allí va.
El rock & roll nace, como todos saben, en Disneylandia, y lo inventó aquella gente de color de origen africano que fue esclavizada por los blanquitos para trabajar en las plantaciones de algodón. Lo que los blanquitos no sabían, era que estos negritos, además de reproducirse como conejos, tenían habilidades musicales innatas. De modo que luego del blues, el rhythm & blues y el jazz, inventaron el rock & roll de la mano de Muddy Waters, Little Richard, Chubby Checker, Chuck Berry, etc. y parece que los blanquitos, luego de espantarse, escucharon atentamente a Papá Capitalismo que les decía “No sean giles, ahí hay negocio, my fellow Americans” y empezaron a copiarlos. Así fue que apareció un tipo ridículo con un rulo rubio engrasado sobre la frente como Riverito, pero gordo, cantando Rock around the clock, que obviamente fue un éxito. Luego vino Elvis y el rock yanqui se hizo más popular que la mantequilla de maní.
Y ya que estamos, me permito una pequeña digresión: les cuento la historia (apócrifa) de la mantequilla de maní. Corrían tiempos de guerra (los yanquis siempre están en guerra), entre muchos otros alimentos la manteca escaseaba y había que reemplazarla por la de maní que abundaba y era más barata, pero era un asco. Bien, dicen que le pidieron a Elvis que la promocionara, a lo cual accedió de buen grado y con éxito. Gracias a Elvis los yanquis son los únicos que consumen mantequilla de maní por millones de toneladas anuales y creen que es tan sabrosa que se la comen con cuchara del frasco.
Del mismo modo que adoptaron la mantequilla de maní como si se tratara de un manjar de los dioses leyeron (interpretaron) al rock de los negritos: lo leyeron mal, sin gracia, asexuado, sin feromonas y mersa como la mantequilla de maní. Tanto arruinaron los yanquis el R&R que los negritos dejaron de tocarlo y se lo regalaron, quedándose con el blues, el jazz y el soul que no fue poco.
El rock yanqui blanco (de ahora en más rock yanqui) es la regurgitación de una copia mal masticada, hecha a los apurones para vender discos. Miren que los yanquis tuvieron cientos de bandas y músicos de rock, pero a la posteridad pasarían con mi poco humilde criterio los siguientes: Jimmi (Obama) Hendrix, The Doors, Bob Dylan, Creedence Clearwater Revival, Tom Waits y Nirvana. No, ese no, no, ese tampoco, ese tampoco. El resto son solo epígonos (qué linda palabra).
Pero si por el contrario digo Beatles, Rolling Stones, Led Zeppelín, Deep Purple, Clapton, The Who, EL&P, Elton John, Yes, Genesis, Pink Floyd, Queen, King Crimson, Black Sabbath, The Police, Sex Pistols, Iron Maiden, David Bowie, (la lista sigue) estoy hablando del rock inglés y su evolución.
Ahora afirmo: los ingleses leyeron mejor al rock que los yanquis, ¿qué pasó? ¿Cómo es que lo leyeron mejor unos que otros?
Para que nos podamos ubicar mejor en mi tesis habría que imaginar que una vez nacido el tango en los suburbios porteños y es pasteurizado para y por la burguesía con músicos de piel clara favorecidos con su mecenazgo, de pronto los artistas españoles de España (de dónde sino) no solo importan el tango original sino que lo reescriben, reinventan y diversifican en subgéneros, lo hacen evolucionar hacia lugares muy alejados de las raíces tangueras pero con su esencia en algún lado siempre presente.
Entiendo que la operación de lectura que hacen los músicos ingleses del rock es diferente a la yanqui, en tanto que estos últimos pensaron todo el tiempo en cómo hacerse ricos tocando la guitarrita y no en arte -salvo las honrosas excepciones arriba mencionadas-, mientras que los ingleses pensaban en las posibilidades de expresión y rebeldía que les daba el R&R. Naturalmente que la idea de salvarse económicamente no estaba ausente. Sin embargo, es importante mencionar la tendencia socialista de muchas bandas de rock inglesas cuyo germen provenía de las clases obreras. El mayo francés del ´68 había sacudido el pensamiento europeo y no es extraño que Peter Gabriel escribiera sobre injusticias sociales en sus temas con Genesis y más tarde como solista. Roger Waters confesó en un reportaje que su arte estaba por encima de todo y que lo consideraba la herramienta para provocar una revolución social; hasta que un día encontró que en su cuenta bancaria había millones. Dijo entonces algo así como “si yo no hago algo con esta guita otro lo va a hacer por mí”. Allí estaba Money, su ironía contra el sistema deviniendo en una ironía mayor. El capitalismo tiene esas cosas; es como el increíble Hulk, cuanto más se lo ataca más invencible se vuelve. Pero atención que si se trata de lecturas bien podríamos preguntarnos quién leyó mejor al Capitalismo, si los ingleses con sus padres fundadores, Adam Smith & Cía., o los yanquis en el siglo XX. Ya saben la respuesta.
El compromiso social estuvo presente en los músicos de rock ingleses, en los yanquis (salvo las excepciones) no. Tener compromiso social en Disneylandia era lo mismo que ser comunista, y serlo constituía y constituye un pecado mortal. Ese idealismo utópico, subversivo -presente solo en la efímera generación Pop que no trascendió, salvo en Dylan- fue lo que le faltó al rock yanqui para ser ellos los que ponían las reglas y no las disqueras. Les faltó huevo y compromiso social y se nota en sus canciones. El vituperado marxismo, además de ser el legado de Lucifer en la Tierra, propone el compromiso social. En ese ámbito, el arte es un poco más autónomo, tiene un fin social. En términos estéticos, hay vanguardias, hay rupturas, cambios, corrientes, caldos de cultivo, despelote y muerte (infaltable).
Es cierto que el rock desde su nacimiento no ha hecho otra cosa que generar dinero y el sistema, que al principio lo miraba con desconfianza, se dio cuenta de que debía cuidarlo como una de sus mejores inversiones.
Es cierto también que el rock de hoy ya no es aquel sensual y sexual R&R de los negritos simpáticos, pero sí fue el eslabón artístico que permitió masificar la música, al punto que un impertinente como quien suscribe toque en una banda que hace covers.
Algún desprevenido se preguntará por qué no hablé del rock del siglo XXI; le recuerdo lo que dije al principio: el rock ha muerto a mediados de los ’70. Lo que se hizo después bajo ese nombre es el eco de su fantasma.
El rock ha muerto, vivan el rock inglés y Capusotto.





8 comentarios:

Anónimo dijo...

BA, como casi siempre, su opinón sobre musica es impecable. Eso sí: admitamos que existe esa cuestión de rock inglés vs. rock yanqui y que cada uno tiene sus adeptos como River y Boca, parrilla con fierrito o canaleta, bañadera o ducha y coca o pepsi. Yo estoy de su lado: God save the british rock.
El único eeror que le detecto a su artículo es el siguiente: el rock lo inventó Marty Mc Fly tocando en la fiesta de graduación de sus padres; ahí lo escuchó Marvin Berry, primo de Chuck, lo llamó por telèfono y le hizo escuchar lo que estaban tocando. Chuck solamente copió lo que le hicieron escuchar.

El Burgués Apóstata dijo...

Marty Mc Fly alias Calvin Klein

Anónimo dijo...

BA, supongo que no debo usar este medio para mensajes personales, pero no te puedo ubicar por cel y en la compu me borraron la libreta de direcciones (josdepú). Mañana tengo un compromiso a la mañana y si me borro tambien a mediodía no les va a gusta mucho a un par de personillas. Tratá de llamarme o mandame un email.

El Burgués Apóstata dijo...

ok tufí, te llamo

Walter Hego dijo...

Sí, pero hablando de músicos yanquis, yo agregaría algunos más, como los enormes Grateful Dead, el no menos grande Frank Zappa y Lynyrd Skynyrd. (Probablemente falte algún otro, como por ejemplo los Talking Heads, pero ahora son esos los que me vienen a la cabeza.)

Anónimo dijo...

Cuidado, don Burgués. Que su ideología no interfiera en su percepción y disfrute del arte. Un conocido mío, acérrimo comunista él, escuchaba música caribeña pero nunca nada interpretado por la "gusano" Gloria Stefan. Triste.

El Burgués Apóstata dijo...

herr professor, estaba esperando a que alguien como ud me advirtiera de los peligrosos senderos ideológicos que holla este artículo.
pero como decía lulio caesar, "alea jacta est" (es jalea de acta)

Anónimo dijo...

Lo siento, no entiendo guaraní.
El César tiene su excusa, está muerto. Usted todavía puede cambiar. Yo le tengo fe. ¡Sí, podemos!

atte.