24/2/08

Agua de la noche anterior


Hace un rato fui a encender la luz del velador para escribir un nuevo post -veo que estoy prolífico estos días- y me encontré con un vaso de agua intacto que mi mujer dejó la noche anterior por si tenía sed entre sueños.

Sentí ganas de tomarla pero vi que contra las paredes del vaso se agolpaban pequeñas burbujas.

Recordé que alguien me había dicho que esa agua absobre los espíritus errantes de la noche y que para evitar embrujos no hay beberla.

Una estupidez, una insensata superstición.

Ver el agua me dio sed, mucha.


Por supuesto que no la tomé.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Agua carbonatada, que le dicen... Yo tampoco tomaría del vaso donde tu mujer ha dejado la dentadura.

El Burgués Apóstata dijo...

la dentadura no, el ojo de vidrio.