10/2/08

Cómo elegir un libro


Sea para regalar o para la propia lectura, la clave (casi infalible) para no errar al elegir un libro es, cha chán cha chán:

Ya dije en el post anterior que con sólo leer la primera o primeras páginas era suficiente para saber si el resto del texto sería gratificador.

Voy a ir más allá: Abrir en la primera página del relato y leer la primera oración. Con eso bastará.

Esto lo explicó muy bien durante su curso de Literatura del siglo XX, en la UBA, Daniel Link.

Sucede que la primera página es la clave de la ruptura entre la hoja en blanco (la nada) y la escritura.
El escritor pondrá en esas primeras líneas la fuerza motora que dará vida a todo el relato. Si esa fuerza inicial no es lo suficientemente cautivante para el lector, difícilmente pueda conservar su fidelidad hasta el final.
Este principio es aplicable a cualquier texto: poesía, cuento, novela, artículo periodístico, post de blog, ensayo, etc.

Es lo que llamamos "gancho". Si el texto no tiene ese anzuelo que nos perfora el labio superior de las ganas y nos tira hacia sí simplemente lo abandonamos.
Con la música, cine, pintura, esculturas, etc. pasa lo mismo (también son considerados textos, Barthes mediante, todo es texto).

Seguidamente, la ruptura de la hoja en blanco (la primera frase) de algunos textos célebres. Juzguen por su cuenta.

"En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor."
El Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes Saavedra.


"Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo."
Cien años de soledad, Gabriel García Márquez.


"El universo (que otros llaman la Biblioteca) se compone de un número indefinido, y tal vez infinito, de galerías hexagonales, con vastos pozos de ventilación en el medio, cercados por barandas bajísimas."
La biblioteca de Babel, Jorge Luis Borges


“Una mañana, Gregor Samsa despertó de un sueño intranquilo y se encontró convertido en un enorme insecto.”
La metamorfosis, Franz Kafka


"Estaba agotado, agotado hasta no poder más, por aquella larga agonía. Cuando, por último, me desataron y pude sentarme, noté que perdía el conocimiento."
El pozo y el péndulo, Edgar Alan Poe


Bien, la gran pregunta ahora: ¿habré triunfado en que el eventual lector haya leído hasta el final este post?


2 comentarios:

Félix Amador dijo...

Desgraciadamente, los libros tienen más páginas y sé por vía directa que muchos editores 'sólo' leen las primeras dos páginas de los manuscritos que les llegan o, en el mejor de los casos, diez o veinte antes de deshechar a los que llegan sin agentes.

El Burgués Apóstata dijo...

Félix!
es cierto lo decís, pero creo que lo que no aparece de entrada no lo hará luego.
Seguramente habrá obras que se ponen buenas por la mitad, pero entonces, por qué el escritor no la puso buena de entrada?
Obviamente, lo que es bueno o no, es totalmente subjetivo (en realidad no hay otra instancia, la objetividad no existe) y lo que nos parece bueno puede no serlo para otros.
Por supuesto, está el famosísimo criterio comercial de por medio que tanto mal nos hace a todos. Contra éste no hay nada que hacer...